domingo, 5 de agosto de 2007

ANTONIN ARTAUD. Noche



Los mostradores del cinc pasan por las cloacas
la lluvia vuelve a ascender hasta la luna;
en la avenida una ventana
nos revela una mujer desnuda.

En los odres de las sábanas hinchadas
en los que respira la noche entera
el poeta siente que sus cabellos
crecen y se multiplican.

El rostro obtuso de los techos
contempla los cuerpos extendidos.
Entre el suelo y los pavimentos
la vida es una pitanza profunda.

Poeta, lo que te preocupa
nada tiene que ver con la luna;
la lluvia es fresca,
el vientre está bien.

Mira como se llenan los vasos
en los mostradores de la tierra
la vida está vacía,
la cabeza está lejos.

En alguna parte un poeta piensa
No tenemos necesidad de la luna,
la cabeza es grande,
el mundo está atestado

En cada aposento
el mundo tiembla,
la vida engendra algo
que asciende hacia los techos.

Un mazo de cartas flota en el aire
alrededor de los vasos;
humo de vinos, humo de vasos
y de las pipas de la tarde.

En el ángulo oblicuo de los techos
de todos los aposentos que tiemblan
se acumulan los humos marinos
de los sueños mal construidos.

Porque aquí se cuestiona la Vida
y el vientre del pensamiento;
las botellas chocan los cráneos
de la asamblea aeréa.

El Verbo brota del sueño
como una flor o como un vaso
lleno de formas y de humos.

El vaso y el vientre chocan:
la vida es clara
en los cráneos vitrificados.

El aerópago ardiente de los poetas
se congrega alrededor del tapete verde,
el vacío gira.

La vida pasa por el pensamiento
del poeta melenudo


- De "Oeuvres Completes" (tome I).
Versión de Aldo Pellegrini -

1 comentario:

Anónimo dijo...

Artaud, Artaud, Artaud. Gracias por subir esos textos, me dieron alivio.

A. F.


Lourdes Sánchez Benítez

dibujos

dibujos
Lourdes Sánchez Benítez. (perversión bíblica).

Foto de EVA SÁNCHEZ BENÍTEZ

Foto de EVA SÁNCHEZ BENÍTEZ

Lourdes Sánchez Benítez